EL SOL Y LA GENETICA
…..he aquí que un ángel del Señor se aparece en
sueños a José y le dice: Levántate, toma al niño y a su madre, huye a Egipto y
estate allí hasta que…
Algunos evangelios cuentan como
Herodes mandó matar a los inocentes, pues tenía miedo de ser sustituido por el
Mesías que según las profecías habría de venir. Fue entonces cuando José, el marido
de la Virgen, avisado por un ángel se trasladó con su familia a Egipto hasta
que tuvo noticia de la muerte del tirano. Por supuesto que esta narración no es
sino un recurso literario empleado anteriormente en la historia de Krishna
cuando el malvado rey Kamsa, ordenó matar a los niños en la India. También
aparece esta figura en el caso de Moisés cuando el faraón mandó matar a los
recién nacidos. Todos estos relatos son falsos, pero en el caso de Herodes se
sabe con seguridad puesto que Josefo y los otros historiadores de la época no
recogen en absoluto tal barbaridad histórica.
¿Por qué Jesús tiene que ir a
Egipto?
Egipto era el único lugar donde
ese niño podría seguir evolucionando en su cuerpo físico. Sus órganos, su piel,
su cerebro, necesitaba ser tratado en el mejor de los laboratorios terrestres :
las pirámides.
Jesús fue llevado al interior de
Keops donde maestros en ingeniería genética modificaron sus sentidos para que
creciese de forma diferente al resto.
Durante todo ese tiempo se
impregno de la cultura y costumbres egipcias, marcándole de tal forma que
intento reproducirlas de adulto en Israel (el trato ecuánime hacia la mujer,
los avances en medicina y astrología, el desarrollo y tratamiento de plantas
medicinales…..)
La sangre del Cristo no era la
que hasta entonces tenía el ser humano. En Jesús se inaugura un nuevo grupo
sanguíneo, el AB. Sangre venida del espacio para mejorar la raza humana.
Jesús fue programado tanto en su
nacimiento como en su devenir hasta la muerte en la cruz. Tuvo necesariamente
que ir a Egipto en la primera etapa de su vida, para que dicha siembra genética
recibiera los nutrientes necesarios que solo la energía piramidal podía
otorgarle. Solo cuando se conocen los efectos terapéuticos de las pirámides se
puede afirmar tal cuestión. No es caprichoso por tanto, que Jesús viajara a
Egipto, en igual medida que lo hizo en el mismo tiempo Apolonio de Tiana cuando
viajó a la India. Esto seres estaban programados y sus actos dirigidos por una
Inteligencia superior.
Es necesario llegar al siglo XXI
para comprender la tecnología de los dioses.
Quizás tenemos que regresar a
casi medio millón de años atrás para ver cómo seres procedentes del espacio
visitaron nuestro planeta para acelerar la vida de un primate y crear el “homo-Sapiens”.
Fue mediante inserción genética neuronal y biológica, que se mejoró la vida del
primate primigenio y se le programó para un ascenso evolutivo, que sin duda nos
llevará millones de años en el futuro.
Al final seremos a semejanza de
nuestros padres espaciales, seres extraordinariamente evolucionados y habiendo
conseguido los valores armónicos de Justicia, Paz y Amor universales. Seremos,
sin duda, hombres realizados plenamente con un estado de conciencia compartido
en valores superiores y por supuesto, armonizados y confederados con otras civilizaciones
del Cosmos.
Aunque nos resulte frustrante,
los mayores y mejores procesos evolutivos y ascensionales de la historia, han
sido provocados o tutelados por nuestros padres genéticos. Han sido ellos los
que en diversos periodos de nuestra Historia, han programado
contactados-profetas, avatares y enviados que mediante su ejemplo y su
doctrina, crearon modelos de comportamiento más evolutivos.
Pero simultaneando a estos enviados,
los Seres Superiores también activaron otra actividad más silenciosa y más
tecnificada. Nos estamos refiriendo a la aceleración genética de la raza,
mediante la inseminación de genes en mujeres terrestres, de las que nacieron
grandes seres o activando mediante su tecnología, mejoras en la fauna y flora
del planeta, con aportaciones de frutos y animales venidos de otros rincones
del Cosmos. Estas Vírgenes que en forma milagrosa alumbraron grandes seres se
reparten por todas y cada una de las razas terrestres. Eran mujeres preñadas
por genes que aceleraron la evolución terrestre.
¿Cuándo se dieron estas mejoras?
Sin ninguna dura, cada vez que nuestro Astro Sol producía una aceleración en la
longitud de onda y frecuencia de la emisión de la luz, Ellos venían y adaptaban
la materia terrestre a esta nueva emisión solar. Es el Sol el que programa la
vida en el planeta. Es el Sol el que puede alterar la genética humana,
mejorándola o destruyéndola.
Cuando nuestro Sistema Solar alcanza
posiciones claves frente al Centro Galáctico, como el que se da en este año
2012 con las profecías Mayas, se produce una tremenda actividad de ingeniería
genética por parte de los dioses para acelerar este proceso evolutivo.
Su tecnología es impresionante y
roza la ciencia ficción para nuestra comprensión. Vamos a narrar algo inverosímil
que para muchos resultará una falacia, pero que para otros resonará en su
interior como algo recordado, intuido o compartido:
La Confederación de Mundos a
través de los “24 Ancianos de la Galaxia” habría creado un plan por el cual,
cuarenta y dos generaciones de seres terrestres habrían sido manipuladas
mediante una mejora genética progresiva; siendo la Virgen María, la última de
dichas mejoras por la cual habría nacido el llamado Jesús el Cristo. Fue este
ser el que inauguró un nuevo grupo sanguíneo sobre el planeta, se trata del “grupo
AB” Esta sangre había sido transportada desde el planeta Hoova, proveniente de
uno de sus grandes maestros, al que los humanos llamaron Jehová.
Jesús el Cristo, era el primer
ser nacido de madre terrestre con una impronta genética-evolutiva, como nunca
se había dado en el planeta. Su sangre era sagrada, distinta, superior, más
perfecta. Es por esto que en torno a su sangre se levantaron las leyendas del
Grial y de la redención en la Cruz.
Volvamos al Sol. ¿Qué pasaría si
a nuestro Sol le introducimos nuevos valores programáticos; es decir, si
aceleramos su frecuencia? Pues indudablemente que la materia terrestre tendría
que adaptarse a los nuevos valores. Algo ocurrió en este sentido hacia el año
30 de nuestra Era. Pues Plinio el Viejo, recoge en sus crónicas históricas,
como hacia ese año un fenómeno extraño, como jamás se había dado en la Tierra,
ocurrió en nuestro Sol. Este fenómeno había dejado perplejos y extrañados a los
astrónomos de su época.
Lo curioso es que cercano a
Alejandría en el país de los judíos, en
ese preciso instante Jesús el Cristo moría en la Cruz. El Nuevo testamento
también recoge este proceso en forma milagrosa: “…..Era
alrededor del mediodía. El sol se eclipsó y la oscuridad cubrió toda la tierra
hasta las tres de la tarde. El velo del Templo se rasgó por el medio. Jesús,
con un grito, exclamó: «Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu». Y diciendo
esto, expiró”
Fue en el preciso instante en que Jesús es introducido “vivo”
en el sepulcro, preparado por Jose de Arimatéa, cuando su sangre fue extraída
por estas Entidades Estelares. ¿ Para qué querían la sangre?...
Justo en ese instante una enorme astronave se acercaba a
nuestro Sistema Solar. Su procedencia era de un sistema solar próximo al centro
galáctico. Su carga: plasma solar de dicho sistema. Plasma de una gran calidad
vibracional, puesto que cuanto más cercano al centro galáctico más y mejor su
calidad energética.
Una pequeña astronave, que en todo momento había seguido la
pasión del Cristo, recogió la sangre del Maestro y voló fuera de nuestra órbita
planetaria, dado que la gran astronave venida del centro galáctico si se habría
acercado más a nuestra órbita habría desestabilizado nuestro eje magnético. Su
dimensiones de varios Km. de largo y ancho
y su campo magnético era superior al de muchos planetas.
Los ingenieros celestes dentro de la astronave tomaron la
sangre del maestro y la mezclaron con el plasma solar del centro galáctico.
Esta mezcla fue sometida a una fuerte aceleración vibracional. Esta mezcla fue a
su vez informada por los ingenieros genéticos del espacio. El resultado final fue
una bomba de plasma con capacidad de cambiar el ADN y ARN biológico humano.
Faltaba insertarlo en el hombre. Pero lógicamente no se podía
inyectar a todos y cada uno de los seres vivos de nuestro planeta. El proceso,
como en otros casos, era protocolario y ya repetido en la antigüedad: Bastaba
con inyectar dicha programación en el Sol, para que la nueva información y
frecuencia solar pudieran alterar, programar y mejorar la materia en nuestro
planeta y acelerar a su vez la evolución del cuerpo y psique humanas. Así cada
mañana los rayos del sol, bañarían de nueva información a todo ser viviente en
el planeta.
La gran astronave se acercó al Sol y un tremendo disparo de
una bomba de plasma chocó contra el halo solar, preñándolo de una nueva
información y bajando el nivel de
radioactividad solar.
Fue a partir de entonces que los sueños del ser humano fueron
más armoniosos, qué disminuyó la violencia de las fieras y de los hombres que
las flores fueron más bonitas, que el poeta recitó sus mejores poemas y que
comenzó a hablarse del Reino de Dios sobre la Tierra.
Este fue el verdadero misterio de la intervención solar de
los Seres superiores, por la cual y empleando la figura de Jesús el Cristo
consiguieron un ascenso evolutivo de la Humanidad. Pero la iglesia ni entendió
ni aún entiende este proceso y siguiendo un modelo exotérico, que no esotérico,
creo una religión sectaria contraviniendo las recomendaciones del propio Jesús,
que era contrario a templos y religiones y que decía que solo había un maestro
y estaba en los cielos. Solo el ignorante adora a un figura humana, por ser
incapaz de entender los misterios. Solo el ignorante otorga todo el poder a un
ser, cuando fueron y miles de seres, dimensiones, lógicas, medios y sistemas los
que se pusieron en marcha para acelerar dicho proceso evolutivo. Solo el que
tiene una venda en los ojos ve las formas, sin penetrar en las causas. Solo el
iniciado es capaz de comprender y maravillarse ante la “Inmensa Fuerza que
mueve ciento cincuenta billones de Universos” mientras que el pobre espiritual
venera a formas y figuras próximas a su propia y limitada naturaleza humana.
La alineación planetaria que estamos viviendo en estos
tiempos y a la que se refiere las
profecías Mayas, propiciará otro ascenso evolutivo, por lo tanto ya está en
marcha el retorno de los dioses y las sistemáticas intervenciones genéticas que
en todas las latitudes de la Tierra se están dando en estos momentos. Muchos de
nuestros niños ya están codificados y mejorados con un nuevo programa. Una nueva vacuna sanguínea se verterá en el
Sol y los cambios serán inevitables en los próximos tiempos. Estos cambios no
estarán exentos de traumas y de procesos violentos, pues es necesario que muera
lo viejo para que nazca un nuevo orden, un nuevo amanecer. Así lo dicen muchas
las profecías de las diversas razas. Pero al igual que antes, no se comprenderá
bien el misterio de la sangre y su vinculación solar.