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EL MEJOR LEGADO: QUIMIOTERAPIA O EL DOCTORADO.

Parece no tener relación alguna, la quimioterapia es un tratamiento para el cáncer y el doctorado es la culminación por excelencia que cualquier universitario quisiera tener.

Pues bien, si tuviera un hijo me cuestionaría a fondo cual sería el mejor legado que le pudiera dejar. Por supuesto el arte, la cultura, una carrera universitaria, el doctorado, el bilingüismo, la música, el deporte, la informática…… Todas estas bases son las primeras premisas que mi mente plantea para dejarle un buen legado.

Pero, ¿de que le serviría todo eso si no tiene salud?, ¿Si durante toda su vida tiene que luchar con una u otra enfermedad?, ¿Si la quimioterapia entra a formar parte de su desarrollo?

El dilema empieza a verse un poco más claro ¿verdad?

Para acceder a la cultura, el arte y una buena educación se necesita sobre todo vivir en una ciudad que te lo pueda proporcionar, y para tener salud, necesitas vivir lo más lejos posible de cualquier ciudad conocida.

Paso a paso vamos a empezar a desmenuzar lo que supone vivir en una ciudad:

1º- Todos los lunes ponemos nuestro uniforme de trabajo dentro de un armario en nuestro céntrico despacho. Llegado el viernes los recogemos para lavarlos aunque ni siquiera nos ha dado tiempo a ponernos los. ¿Por qué? Se preguntará el lector. Aunque parezca mentira el uniforme está negro. Una gruesa capa oscura lo recubre y por más que lo sacudes no se  quita. La deducción de esta situación sería: “Lo que esta en el uniforme, estará en nuestros pulmones”. Micro-partículas de diesel, CO2, petróleo, plomo, sustancias químicas flotando en el aire creadas por aerosoles, sprays, insecticidas, lejías, perfumes….. nos inundan continuamente. NO PODEMOS ESCAPAR DE LA CONTAMINACIÓN AEREA DENTRO DE LAS CIUDADES.

2º - Todos los viernes voy al supermercado a comprar provisiones para el resto de la semana. Es el peor momento, la depresión me entra por los ojos y me llega al corazón, cuando después de malgastar más de una hora y media en el supermercado no puedo echar ni un producto  al carro.

¿Pero tenemos que comer algo? Dice mi pareja. Tienes razón, tengo un hambre que no veo, pero ¿cual de todos los venenos que nos venden a precio de oro nos mataría con menos sufrimiento?

Es imposible si te responsabilizas de tu salud que puedas comprar comida. Todo está hidrogenado, modificado, estabilizado, con aceites vegetales… Y para más inri, nos venden que por estar hecho con aceite de girasol y ser rico en omega 6 y 9 es saludable.

Voy a recomendar al lector, que si tiene la mínima inquietud en su salud lea el libro del Dr.DWIGHT  LUNDELL  prestigioso cirujano cardiovascular estadounidense – pionero en operaciones a corazón abierto – así como responsable de la especialidad en importantes centros hospitalarios. En su libro : THE GREAT CHOLESTEROL LIE , why inflammation kills and the real cure for heart disease ( la gran mentira del colesterol) explica claramente como lo que perjudica a nuestras arterias y corazón , no es el colesterol sino la inflamación. Es decir existe en nuestras dietas una gran descompensación entre el omega 3 (anti-inflamatorio por naturaleza) y el omega 6 y 9 (inflamatorio). Todos los aceites que no sean de oliva no se deben de tomar pues el de girasol, corza, soja…. Son omegas 6 y 9 e inflaman pero además los pocos aceites que encontramos como omega 3 que sería el lino, enrancian rápidamente a no ser que vengan con cristal opaco o en continentes oscuros. Pero además, el aceite de oliva solo se puede consumir en botella de cristal pues si está en plástico, absorbe su toxicidad. Pero además, cualquier azúcar o carbohidrato refinado también inflama las arterias, debemos de comerlos integrales y hacernos nosotros mismos los dulces o pasteles con miel. Pero además, aún comprando la harina integral para hacerte tú mismo el pan y el pastel resulta que la levadura que se tiene que usar para que el pan suba tiene parabenes o un estabilizante que es lo mismo. Pero además si intentas comer salmón o pescado azul para aumentar tu dosis de omega 3 en tu dieta el salmón que compras es de piscifactoría alimentado con pienso compuesto por lo que el pobre animal no ha visto ni en pintura una alga con la que él sintetiza en omega 3 que luego yo lo asimilaría. Si el Salmon no lo fabrica, yo no lo ingiero. Pero además si pago a precio de oro salmón salvaje de los mares del norte, el mar está con tal capa de contaminación  de plásticos que el pobre salmón en sus entrañas tiene más bolsas del Carrefour  que las que hay en los centros comerciales, por lo que si me como el salmón comeré plástico y no omega 3. Pero además si me da por comer carne, sanidad obliga a todos los ganaderos a poner antibióticos, hormonas, pre-hormonas tanto a la ganadería como a la crianza de aves. Pero además todos estos animales y aves les alimentan con pienso compuesto realizado como en el caso de los pescados de piscifactorías con desechos de animales muertos de cualquier clase. Es decir que si las vacas son estrictamente vegetarianas al comer a sus familiares muertos las convierten en carnívora por lo que la vaca acaba volviéndose loca y yo al comerla también (encefolopatía espongiforme). Pero además, los huevos de las gallinas aunque sean ecológicos y criadas a aire libre para poderlos comercializar las gallinas tienen que ser vacunadas y desparasitadas con compuestos químicos que yo también me los como provocando intolerancias, alergias y tumores. Pero además, si decides solo comer fruta y verdura resulta que antes de que llegue a tu boca la someten a más de 250 tratamientos entre pesticidas, fungicidas, estimuladores de la maduración, retardadores de la maduración, ceras para darle el color adecuado…. Pero además, si vives en un piso como yo, la autosuficiencia en la crianza de gallinas, cereales, fruta y verdura se hace un poco difícil, pues a la gallina no le gusta estar en la bañera y las raíces de trigo junto con el parquet no es la mejor combinación. En definitiva NO PODEMOS ESCAPAR DE LA MANIPULACIÓN ALIMENTICIA EN LAS CIUDADES

3º - Nos han hecho creer que la belleza parte desde el exterior, obligándonos a realizar un ritual diario para cuidar la piel y estar mas sano. Las pantallas solares son obligatorias para protegernos de los rayos del sol pero ¿a qué coste?, ¿no sería mejor evitar el sol antes de exponernos a una serie de compuestos químicos  de dudosa eliminación?

Tras analizar tejidos procedentes de las mamas a pacientes sometidas a mastectomías por cánceres de mama primarios un equipo dirigido por la Dra Philippa Darbre constató que ¡El 99% de las muestras contenían parebenos, químicos y sintéticos! De procedencia epitelial. Benzylparabem, butylparaben, isobutylparaben, isopropylparaben, ethylparaben, E214,E218,E216, propilparaben, methylparaben, DEA, cera microcristalina,, metilsilanol, ozokerite, ceresin, glicol propileno, DEHP, BBP, DBP, DINP, DIDP, DNOP, dietilhexiloftalato, dibutilftalato,butilbenzilftalato,diisononilftalato,chlorophenol, E321, HC, diazolidinil, todos los que tienen el termino isopropil…….. En fin podría estar escribiendo compuestos químicos y sintéticos existentes en nuestra vida que usamos a diario en la mayoría de los productos de higiene y cosméticos, tintes para el pelo, champús, dentífricos, geles para el afeitado, pantallas solares, lubricantes sexuales, fijadores, acondicionadores, jabones. Todos estos compuestos algunos los ingerimos y otros nos los ponemos diariamente en nuestra piel, la cual los absorbe con una rapidez pasmosa y pasan al torrente sanguíneo sin hacer proceso digestivo acumulándose sobre todo en nuestros órganos sexuales provocando, canceres, tumores, problemas de fertilidad, daños en la mitocondria irreversibles, masculinidad en mujeres y feminidad en hombres, ginecomastias tanto masculinas como femeninas, alopecias, manchas, atrofia uterina y espermática, ovarios poliquísticos, endometriosis, problemas tiroideos, además de acumularse en el cerebro dando problemas en niños de hiperactividad, síndrome de atención y en adultos de párkinson, perdida de memoria, temblor primario…… Prefiero no seguir pues creo que ha quedado claro, que cada vez que nos vamos con nuestros hijos a la playa y les ponemos, más y más pantalla 50 les estamos poniendo más y más tóxicos que no podrán eliminar. NO PODEMOS ESCAPAR, ESTAMOS INVADIDOS DESDE LOS PRODUCTOS BASICOS DE HIGIENE HASTA LA ALTA COSMETICA,  que por cierto cuanto más cara mas peligrosa.

4º - Los wi-fi, se ha demostrado ante resonancias magnéticas el impacto cerebral que provocan. Intento apagarlo por la noche pues cuando estoy durmiendo no lo necesito y es cuando mas sensible mi cerebro es a ese tipo de onda, pero como vivo en un edificio, mi vecino de la derecha no lo apaga, el de la izquierda tampoco, el de arriba menos y el de abajo ni le conozco.

Después de todas estas reflexiones viene la conclusión final:

Conociendo toda esta información, ¿Cuál sería el mejor legado a vuestros hijos? ¿La educación, cultura, deportes….. que supondría vivir en las ciudades o la vida sana y saludable del campo aunque se tenga que renunciar a tanto logro profesional y cultural?

Difícil decisión ¿Verdad?

Si somos coherentes no quedaría mas solución que cultivar nuestra propia huerta, alimentar a nuestras propias gallinas, respirar un aire sano lo mas lejos posible de las ciudades y hacernos nuestras propias cremas y pantallas. Pues aunque parezca mentira se pueden hacer en casa con plantas y aceites naturales. El oxido de zinc es la mejor pantalla solar que existe y se combina muy bien con aceite de oliva.

A mi no me hubiera gustado renunciar a un ápice de mi formación pues he podido estudiar, aprender un arte y entusiasmarme por el deporte. Pero el precio que tienen que pagar hoy en día nuestros hijos y nosotros mismos no es asumible.

Hace mas de 2000 años, el historiador Flavio Josefo, nos habla de los esenios, monjes que vivían en el tiempo de Cristo, en el desierto, y que dedicaban su tiempo a la meditación y las enseñanzas religiosas. Estos monjes vivían cien años, tenían el don de profecía,  no mentían nunca, se dedicaban a la ayuda a los enfermos.  Cada monje tenía un pequeño huerto que cultivaba cada mañana, empleando el resto del día a la oración y el estudio de los escrituras. Estos seres practicaban el baño por inmersión y vivían esencialmente de su huerto.

En aquel tiempo la media de edad era de 40 a 50 años, mientras que los esenios vivían cien años. Este modelo esenio fue el que inspiró luego en las edades posteriores el modelo de los conventos.  Y estos conventos han sido el mejor modelo de supervivencia a través del tiempo. 

Pero nosotros no podemos imitar este modelo debido a que ya no tenemos huerto y vivimos hacinados en las ciudades.

Vivimos en las ciudades por que la industria el dinero y la cultura están unidas en unidades tremendas de explotación desenfrenada.  Nuestros abuelos que todavía tenían su huerta alimentaban 6,7 u 8 hijos y los sacaban adelante con esfuerzo, ahora mismo en nuestro modelo de vida esto es imposible.

El modelo industrial se ha realizado en estos cincuenta últimos años  siguiendo modelos económicos y comerciales, no sociales ni humanísticos. Si en cada región, en cada provincia y en cada territorio se hubiera creado una empresa y el tejido industrial se hubiera repartido proporcionalmente, las familias no habrían abandonado el medio rural y  cada clan familiar tendría más fácil el modelo esenio. Un tiempo dedicado a la alimentación sana de sus propios huertos, para emplear el resto del día en emplear su tiempo en los social, comercial o profesional.

Si siguiéramos el modelo natural, tendríamos un mayor respeto por la vida humana y tendríamos los hijos justos que puede alimentar cada territorio. Esto ayudaría a quitar la mortandad infantil.

Pero si queremos cambiar el modelo actual, tendremos que comprometernos con cambios radicales en nuestra vida y nuestro compromiso social. Si no quitamos el modelo político que tenemos, es imposible hacer el mínimo cambio. La verdadera democracia tiene que ser asamblearia y por estricto sorteo. Si cada cuatro años, el diez por ciento del electorado es llamado a elecciones, tendremos 3 millones de personas que tienen que realizar asambleas locales, regionales, provinciales y nacionales, para elegir desde abajo a nuestro vecino, al que conocemos y nos garantiza una trayectoria digna. En la siguiente asamblea serán otros tantos que hacen su selección y así sucesivamente hasta llegar a un gobierno y una oposición. El modelo que tenemos ahora esta podrido y vendido a los intereses comerciales y económicos.

Cada clan familiar debería tener su propio huerto y practicar una alimentación sana, sin conservantes ni tóxicos. Cada clan familiar tendría que utilizar solo energías renovables y utilizar coches eléctricos. La mayor autosuficiencia familiar y personal propiciaría menos parásitos sociales, menos aparato funcionarial y más control del gasto.

Y sobre todo que el capital social, sea la solidaridad no los bancos, los gestores y los intermediarios.

En fin no está mal soñar un poco.

Como estas utopías no son ahora posibles, habrá que intentar comer bien y producir higiene física y psicológica.