LA HUERTA BIOENERGETICA
Pues como estaba previsto, hemos
recogido las patatas y vemos que las calabazas van “viento en popa” Quizás no tenga nada de noticiable el hacer
la cosecha a su vencimiento. Pero nuestros productos están tratados no solo en
forma biológica sino mediante energía piramidal. Siguiendo un patrón
astronómico preciso.
Las semillas que introducimos en
nuestra huerta ha sido tratada bajo pirámide. Cada semilla se introduce en una
pequeña solución de agua vitaminada. El agua esta tratada con cromoterapia y
con alta frecuencia. De tal manera, que inducimos en la semilla, antes de su
siembra, una frecuencia electromagnética que produce una aceleración del
germinado. El recipiente con las semillas y el agua, se mete en la pirámide de
cobre durante 72 horas.
El tratamiento se realiza
siguiendo un patrón astronómico preciso. De tal manera que según la disposición
planetaria en relación al lugar de la siembra elegimos con precisión el día de
la germinación y del trasplante al terreno.
El riego se realiza por goteo y
ponemos en función de la disposición
astronómica de los planetas, música de Mozart y de Vivaldi para programar el
crecimiento armónico de las plantas.
Los resultados de esta
programación del germinado y cuidado de las plantas, son extraordinarios. El
sabor de los productos deja perplejos a los agricultores de la zona, que no se
explican como podemos darle la textura y el sabor, que los más ancianos
recuerdan de antaño.
Queremos animar a nuestros amigos
que cultivan la tierra, que prueben a ensayar estos sistemas de cultivo. Se
trata de sintonizar nuestros frutos, no solo con el entorno, sino con las energías
cósmicas y con la energía vital que emana el Universo.
Afortunadamente vivimos en la
bendita isla de La Palma, donde podemos tener hasta 3 cosechas al año, pero no
es lo mismo sembrar en Tauro, que sembrar en Cáncer o en Capricornio. No es lo
mismo que la Luna o Venus estén en este u otro signo o que sembremos con una
fuerte oposición planetaria. El cuerpo
físico come frutos materiales, pero nuestro cuerpo astral, se alimenta de “prana”
universal y nuestros sembrados siguen un patrón astronómico preciso y unos
protocolos terapéuticos intelectualmente estudiados.
Basta con poner las semillas bajo
pirámide durante 72 horas para conseguir unos frutos con más sabor, con más fibra,
con más nutrientes. La pirámide tiende a deshidratar y preservar las semillas
por más largo tiempo. De esta manera los
frutos concentran los minerales y la fibra con menos agua y con un sabor mucho
más concentrado.
Para los que no tenéis huerta y vivís
en las ciudades, os aconsejamos hagáis un pequeño experimento, poniendo una
semilla en un pequeño recipiente de barro, donde habéis introducido un algodón
mojado en agua. Esta semilla la mantenéis como mínimo 72 horas y luego esta
semilla la trasplantáis al semillero, cuando la planta haya alcanzado el tamaño
necesario la introducís en un tiesto con buena tierra y a esperar a que se
hagan los tomates. Paralelamente a este protocolo, ponéis una planta de tomate
en otro tiesto pero sin haberla introducido bajo pirámide. Cuando se den los
frutos correspondientes, probáis uno y otro y veréis la sorpresa.
Si queréis potenciar el sabor,
podéis introducir asimismo un pequeño imán en el recipiente donde esta la
semilla bajo pirámide y el fruto obtenido será aún más sabroso.
Este es nuestro consejo
Bioenergético para todos vosotros.
www.heliocentro.org
No hay comentarios:
Publicar un comentario