"RECUERDA QUÉ ERES"

                                   “RECUERDA QUÈ ERES”

Este artículo va dirigido a tí. “Sí, sí a tí”. No mi mires hacia la derecha ni izquierda, delante o detrás, estoy escribiendo para tì.

No te conozco de nada, no se QUIÉN eres, a que te dedicas, si amas a alguien o tienes hijos, pero si se una cosa muy importe de ti. Se QUÉ eres y porque vives.

Aunque te parezca mentiras no eres sólo esa persona que ves en el espejo cada mañana, ni tampoco lo que los demás piensan de tí. Eres una fuente de energía que utiliza durante al menos 16 horas al día un cuerpo físico para realizarse, para ser mejor, para aprender y mejorar.

No sé si eres católico, cristiano, budista, reencarnacionista, agnóstico, musulmán……Tus filosofías espirituales son lo de menos, pues todas las religiones coinciden en lo mismo: No somos sólo de carne y hueso. También somos espíritu. La expresión: somos polvo de estrellas queda muy bien ¿verdad?

Si eres ateo, te aconsejo que no sigas leyendo, pues no creo que debas de perder ni un segundo de tu existencia en leer metafísica intangible. Aprovecha al máximo lo que tienes, da rienda suelta a tus instintos pues según tu creencia cuando mueras se acaba todo.

Para todos los demás continuo escribiendo. Aunque sea duro reconocerlo somos energía consciente que necesita experimentar para aprender. Se nace en este planeta para aprender, si además eres la reencarnación de Buda, la Virgen Maria, Matusalén o Rasputín mejor para ti, pero lo que te puedo asegurar es que si ahora estás leyendo este artículo y respirando es para aprender.

La lección más importante es controlar tus instintos básicos: el hambre, la sed, el sexo, la pereza, la avaricia y demás defectos que como seres humanos nos caracterizan.

Voy a centrarme sólo en los 3 básicos: El hambre, La sed y el Sexo.

Como energía que eres no necesitas alimentarte, pero al habitar más de 16 horas en un cuerpo mortal, éste,  necesita de 1500 a 2000 calorías para vivir.

La primera causa de muerte en occidente son las enfermedades cardiovasculares derivados del colesterol y los triglicéridos, por el exceso de comida, y no nos engañemos, el 99% de los problemas de colesterol, transaminasas y triglicéridos en occidente son alimenticio, no genéticos y si no te lo crees lee al Dr. valentin Fuster que  lo deja muy clarito. Y curiosamente la primera causa de muerte en el tercer mundo es el hambre. ¿No te parece ridículo?  Sé que no funciona así, pero si comemos un poco menos en occidente lo mismo hay más comida para repartir en el tercer mundo.

Voy a contarte lo que le pasa a tu cuerpo energético cuando te sobra peso, fumas, te drogas,  bebes alcohol o bebidas azucaradas o comes exceso de carnes y dulces.

En el instante en que durmiendo entras en fase REM, tu cuerpo energético sale del cuerpo para liberarse durante unas horas de su prisión carnal. En ese momento de salida tiene que luchar contra los barrotes de la carne, la cuál, cuanto más grasa tiene más difícil es atravesarla es decir más duros son los barrotes. Toda la comida que te sobra en el cuerpo se acumula en forma de radicales libres y adipocítos. Se sabe que estos son causa de muchas enfermedades físicas, pero lo que no se sabe es que esos radicales libres y adipocitos son almacenes de comida para otros planos energéticos. Existe un plano diferente al nuestro, se le llama astral inferior y en el habitan criaturas que se alimentan de nuestras toxinas energéticas. Cuanto más se alimenten más energía nos roban y más debilitado se va quedando nuestro cuerpo energético o por otros llamado: espíritu.

Cuando tu cuerpo energético sale del cuerpo físico tiene que luchar no solo con esa espesa grasa para salir, sino también con esas criaturas que le atacan en la misma zona donde tienes acumulado esos adipocitos ( grasa) o radicales libres. Tu cuerpo energético se ve herido en su salida y se lleva esa herida durante todo el tiempo, sólo se recupera cuando entra de nuevo en el cuerpo  siempre y cuando este se haya limpiado de esas toxinas . Si no has conseguido resolver el problema de peso antes de morirte, y crees en la reencarnación, reencarnarás con el hígado, o, colon, riñones, estómago y páncreas en mal estado y posiblemente tendrás que llevar tratamiento de por vida para estos órganos.

Te aconsejo que cuides tu cuerpo energético que es inmortal y el templo en el que habita que es tu físico, haciendo ejercicio, comiendo muchas frutas , verduras y cereales. Tu cuerpo es cerealista no es carnívoro. A ningún animal carnívoro le sube el colesterol cuando se alimentan de carne. A ti sí, además también te sube el PSA , el ROSS-links, la creatinina, etc…. Intenta no comer nada precocinado, haz tu la comida aunque te lleve  tiempo.

Intenta beber sólo agua o infusiones naturales nuestro riñones no están preparados para metabolizar ni alcohol ni azucares ni EDTA ni nada por el estilo.

Te voy a decir una cosa, el Amor es la fuerza más poderosa del Universo. Por Amor somos capaces de todo. El Amor es el alimento del espíritu. Tu cuerpo energético  existe para Amar. Por esa misma razón si amas a alguien o alguien te ama a ti, vas a compartir toda tu energía, tanto la buena como la mala. Si fumas, bebes o te alimentas mal, esos radicales libres tienen  una baja carga energética que la compartes con tus seres queridos y cuando tu espíritu deja tu cuerpo cuando duermes, esa carga negativa, se reparte en todos tus seres queridos por igual depositándose en sus puntos débiles. Y si no amas a nadie se reparte por toda la humanidad de igual manera. Provocando el desarrollo de enfermedades y miasmas.

En todas las religiones existen normas de comportamiento, relaciones con nuestros instintos primarios y una de ellas es:

No codiciarás la mujer de tu prójimo.

El ejercicio físico es esencial para regular las hormonas, si las hormonas no las desgastamos corriendo, nadando o saltando, las vamos a gastar codiciando la mujer del prójimo o yendo a la guerra.

Lo mismo que le pasa al cuerpo a nivel energético con respecto a los radicales libres, le pasa a la mente. Ten las prioridades claras, controla tus instintos, si no puedes, vete a correr. La mente o el cerebro, es la zona más complicada pero no imposible de dominar. Anula los pensamientos insidiosos y obsesivos, píntalos de blanco o canta para que desaparezcan.

Cada pensamiento negativo son radicales libres en tu cerebro y las consecuencias de los mismos a nivel energético ya las sabes.

El truco está siempre en la voluntad, hay que desarrollar más la voluntad.

Nacemos sobre todo para vencer nuestros instintos: fumar, beber, comer, drogarse de todo tipo incluidas los ansiolíticos e hipnóticos.

Si los superamos no necesitaremos más un cuerpo carnal para seguir evolucionando y aprendiendo.

Pero lo tenemos que superar todos, toda nuestra especie, toda nuestra raza, puesto que estamos unidos por unos lazos genéticos irrompibles los cuales a nivel espiritual o energético se llaman “Amor”.

En la misma medida que debemos regenerar nuestro cuerpo físico y nuestro cuerpo energético. Tenemos que cuidar la naturaleza, puesto que es una extensión de nuestro propio cuerpo y hacer daño al uno, repercute en el otro con toda la intensidad. El ser humano se dará cuenta antes o después que la enfermedad no solo es un proceso individual sino un proceso colectivo, por el cual, las carencias en un bosque o en tal o cual especie vegetal, mineral o animal, repercute en nuestro propio cuerpo con toda su fuerza degenerativa. La acción individual de hábitos insanos se ceba en el cáncer de otro ser humano o en la debilidad de otro elemento vivo. Desde el más pequeño de nuestros microbios, como la esfera más grande de nuestro propio Sistema Solar son un mismo cuerpo.

Si hoy no cuido mi hígado por apatía pereza, gula o debilidad abúlica, en la próxima vida tendré cirrosis hepática y maldeciré a Dios o al destino por haber nacido con una tara, que solo, yo he alimentado en vidas anteriores.

En el mundo esotérico, es normal ver a seres que piensan que están haciendo una gran misión espiritual salvando a los demás. Otros que son la reencarnación de tal o cual héroe, apóstol o extraterrestre. Los hay que no son de la Tierra, sino que han venido revestidos de carne a salvar al resto de los humanos. Y aquellos que son elegidos para una gran misión cósmica. Otros dicen que esta es la última reencarnación sobre la Tierra ¡ Pobres presuntuosos!, tanto unos como otros hemos venido simplemente a vencernos en las debilidades de nuestros propios actos.  Hemos venido a vencer la pereza, los vicios, la zanganería, la envidida, etc , etc,.. Esta es la verdadera misión. La otra; la que haces en nombre de tal o cual misión cósmica no es sino una proyección equivocada de nuestro propio egocentrismo narcisista. Os aseguro que no hay una oficina de extraterrestres que vienen a hacer una plantilla de elegidos servidores de ningún plan. El verdadero plan, nos guste o no, tan solo es el vencernos a nosotros mismos y entrar con sabiduría en el plan de regeneración de nuestro propio cuerpo y de la Tierra.

Dios no necesita intermediarios. Este modelo de la era de Piscis, de seres que mueren en cruces o que se meten en conventos o que empuñan las armas, o que se hacen ministros o adeptos de tal o cual misión, culto o religión no son sino la expresión del espíritu de manada impreso en el reino animal, por el cual unos mandan sobre otros, unos imponen a los otros o unos dogmatizan a los otros. Necesitaremos varios miles de años para vencer simplemente nuestro propio ego y nuestras debilidades y hábitos insanos.

Hay un proverbio esotérico oriental que asegura que para pasar a la cuarta dimensión necesitaremos 100.000 vidas. Luego está la quinta, la sexta y la séptima dimensión, por lo cual para llegar al plano supremo; sabe Dios cuantas vidas necesitaremos. Los seres superiores que nos crearon y a los que llamamos dioses o ángeles, viven en la cuarta y quinta dimensión, por lo que seguramente tendrán cientos de miles de vida y nos llevan desde varios miles a varios millones de años de evolución. Haciendo un pequeño cálculo, si contamos cuatro o cinco mil años de historia de la Tierra de vida más o menos civilizada y encarnando seguido con un promedio de cincuenta años de vida, habríamos reencarnado  20 vidas por milenio o 100 vidas en cinco mil años.  Y habiendo venido tan pocas vidas a esta escuela de carne, como pretendes levantar la voz y adoctrinar a los demás, cuando el verdadero trabajo es contigo mismo.

Siempre decimos que la clave está en la ciencia, la inteligencia, el discernimiento y la práctica de la virtud.  Y lo que resulta un verdadero milagro es practicar una vida sana, produciendo en nuestro entorno, con nuestros hijos, nuestros vecinos y nuestros amigos bondad, amor y compromiso. Cuidar nuestro cuerpo como si fuera el templo del espíritu, comprometernos con la regeneración de la tierra y cultivar nuestra mente desde la inteligencia y la observación de la ley natural y la enseñanza de los sabios del pasado.

¡Siento haberte estropeado tu misión Cósmica! Quizás leyendo esto, repares en los miles de defectos que produces; por otra parte tantos como los míos; y desde el plano de la humildad, dejes de fumar, de comer como una bestia, de beber, de manchar tu casa, tu cuerpo y tu salud, de polucionar sobre la tierra, de consumir como un depredador, de ser insolidario con la sociedad y con los que padecen limitaciones y de olvidad que tu única misión es la de encontrar la senda de la dignidad.  Si luego viene un “mensajero de Dios” y te nombra “profeta” mejor que mejor, pues seré yo el primero que te invite a casa para que me enseñes el contrato de tal misión sobre nosotros los pobres humanos.

Estos son los  pensamientos que están comiéndome  el coco desde esta mañana después de venir de hacer deporte. Y al escribirlos tan solo pretendo verbalizarlos para recordármelos a mis mismo.

Gracias.